En los años 60/70 era habitual que los niños viésemos películas bélicas. El cine comercial de la época nos narraba las hazañas de los soldados americanos de la segunda guerra mundial. No existía otro cine: La historia la escriben los vencedores y Hollywwod se encargó de rematar a los vencidos mientras satisfacía la demanda de héroes americanos. Estábamos, como se decía en esa época, americanizados.
Pero algo les salió mal. La estética de los alemanes no pasó desapercibida en la pantalla: Los cascos, las gorras, la botas, los uniformes, los vehículos, la propia esvástica, o las insignias de los alemanes eran tan atractivas que, aunque sabíamos que ellos eran los mas malos, nos encantaban. La fascinación por los soldados alemanes es un sentimiento generalizado de muchos de nosotros, porque el reverso tenebroso de la fuerza es muy intenso en la Wehrmacht.
Lo único malo del lado oscuro es que puede llegar a confundir a algunas personas. Sobre todo a las que son propensas a sacar conclusiones rápidas y confunden los términos Wehrmacht con nazis.
De toda la icónica indumentaria de los soldados alemanes, lo que mas me gustaba a mi eran sus armas, sobre todo la pistola parabellum, mas conocida como “Luger”. Un arma con un diseño elegante, atrevido e innovador. Era un arma verdaderamente imponente, porque cuando veías en la pantalla a un oficial sacar la Luger de su funda sabias que alguien estaba a punto de morir. Con una Luger no se amenaza, como con los revólveres del oeste. Con la Luger siempre terminas disparando.
Por eso cuando un día, regresando de clase, vi en el escaparate de mi juguetería favorita la pistola Luger de avc, me juré a mi mismo que esa pieza tenía que ser mía.
La pistola Luger con silenciador de AVC detonaba pistones y fue el primer juguete que me compre con mis ahorros. Recuerdo que por esa época yo ya no era precisamente un niño. Cuando aparecí con ella en casa mi madre me dijo “¿no eres un poco mayor para jugar con pistolitas?”. Pero yo no la quería para jugar, lo que quería era saber lo que se sentía empuñando la Luger que tantas y tantas veces había visto en el cine.
Hasta ese día había tenido muchas pistolas y revólveres de juguete, he incluso una pistola Colt de fogueo a tamaño real, pero ninguna me trasmitió las sensaciones de mi vieja Luger de AVC.
Hoy he conseguido revivir esa sensación porque he comprado en todocolección una luger exacta a la que tenía cuando era niño.
![Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC]() |
La pistola es pequeña, perfectamente adaptada a la mano de un niño de 12 años. |
![Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC]() |
No recuerdo ningún arma de juguete de los 60/70 que incluyese un silenciador. |
![Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC]() |
Dentro de la pistola se acoplaba un rollo de papel con 100 cargas que detonaban dejando en el ambiente un suave olor a papel quemado y fósforo. |
![Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC]() |
La Luger fue uno de los trofeos de guerra mas buscados por los soldados aliados |
![Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC Pistola Luger con silenciador fabricada por AVC]() |
Fue un juguete fabricado en España. Un recuerdo lejano de los que fue la industria juguetera nacional |